Cuando Beethoven visitó al director de música de la catedral de Linz, Franz Xaver Glöggl, en otoño de 1812, éste le pidió a su invitado que «compusiera el llamado Equali para 4 trombones para el Día de los Difuntos [2 de noviembre]». Beethoven accedió de buena gana, y iba a ser su propia música fúnebre, ya que en 1827 los Equali se cantaron en un arreglo para coro masculino como «endecha por el cortejo fúnebre de Beethoven». La versión instrumental original es hoy una obra central en el repertorio del trombonista. Nuestra edición Urtext es basado en el texto musical de la edición completa de Beethoven y contiene una partitura y partes individuales (tanto en do original como en clave de fa moderna).