Con su rico lenguaje armónico y su compleja polifonía, estas obras son ejemplos del romanticismo austrogermánico. Apodada «La Sinfonía del Filósofo», la Sexta Sinfonía de Bruckner, de una hora de duración, se encuentra entre sus obras más breves. La Octava, la última sinfonía que Bruckner completó antes de su muerte, está dedicada al emperador Francisco José de Austria y se conoce como «La Apocalíptica». Esta compilación económica es la única versión en un solo volumen de estas dos obras. Reproducido a partir de una edición autorizada, presenta una encuadernación cosida resistente que le permite abrirse completamente sobre atriles y brindar años de uso y disfrute.