La maestría visual de Michael Jackson (1958-2009) constituye un pilar fundamental en su carrera y su impacto es enorme sobre muy diversos artistas plásticos desde los ochenta hasta ahora, a tal punto que se convirtió en referente de varios, quienes no dudaron en trabajar a partir de su icónica figura: Andy Warhol, Jeff Koons, Rufino Tamayo, Yasumasa Morimura, Marc Quinn, Paul McCarthy, David LaChapelle, Glenn Ligon, Gary Hume, Kehinde Wiley, Zou Cao y Yang Mian, entre muchos otros. Los límites entre las artes son hoy a tal punto difusos que, en mi opinión, por ejemplo, no hay demasiadas diferencias entre el análisis de una videoinstalación de Bill Viola o de un clip del Rey del Pop (como el excelente Scream). En resumen, este escrito evidencia cómo los lenguajes visuales se nutren unos a otros, vinculando a Michael Jackson con un retablo medieval, con un retrato de Luis XIV, con una pintura de René Magritte, con esculturas de Koons, McCarthy y Quinn, con una performance de Ai Weiwei, con un animé de ciencia ficción japonés y con el androide C-3PO entre otras imágenes, todas las cuales testimonian la afirmación de Marcel Duchamp: ?El arte es un juego entre todos los hombres de todas las épocas
CONTENIDO:
Prefacio
I. Vínculos «reales». Una estética concebida a partir de retratos y uniformes «regios»
II. Jackson en vivo, la simbología de la luz. Billie Jean:ego sum lux mundi
III. El Rey del Pop entre la porcelana y el carbón: Jeff Koons vs. Paul McCarthy
IV. Rufino Tamayo: el «escenario» pictórico. El rockanrolero
V. «El grito» de Jackson: más que un guiño a la historia del arte
VI. Zou Cao: Jackson sometido a la estética del palimpsesto y la dactiloscopia
VII. Marc Quinn y Gary Hume: la metamorfosis del hombre frente al espejo
VIII. La hagiografía: el tríptico de David LaChapelle
IX. Kehinde Wiley: Jackson «después» de Rubens
Anexo
Bibliografía
Índice de nombres
Agradecimientos