Iván Osnovikoff: “El montaje documental es de meses, años a veces, pero tiene la particularidad y el placer de no ser tan mecánico como el montaje de ficción, y donde uno se mete a probar combinaciones, a descubrir la forma de la película”.
Carlos Flores: “El proceso de montaje lo que hace es conectar a los personajes en una unidad espacio-temporal y ver la posibilidad de hacerlos producir sentido, es decir, hacerlos dar una clave de lectura de mundo”.
José Luis Torres Leiva: “Los montajes son reescribir la película. En ese sentido, y para mí, si bien en la ficción hay una estructura ya pensada, en el documental el montaje es el guion definitivo”.
Pedro Chaskel: “El montaje surge de los materiales, no tanto de ideas preconcebidas, sino de lo que vamos armando. A mí me pasa que me apropio de los materiales y eso es mi documental, se me olvida que otro lo inventó o lo dirigió y me comprometo con esa edición”.