Ninguno de los vertiginosos cuentos de El lugar donde mueren los pájaros se lee sin desasosiego. Como las buenas películas de terror, no admiten una lectura literal y requieren que aceptes el juego de la ficción y te dejes cegar por su atmósfera inquietante, su halo siniestro, el poder de lo apenas entrevisto, hasta caer en la fantasía macabra y el cuestionamiento de nuestras presunciones biempensantes.
Reseñas
Los protagonistas de estas nuevas historias viven al borde del abismo personal, ese lugar donde puede ocurrir lo extraordinario. Fiordo
Un estilo preciso y controlado; las tramas inteligentes y originales en las que se muestra más de lo que se dice y un eficaz manejo de la tensión narrativa son algunos de los motivos por los que vale la pena visitar este universo literario. La Nación de Buenos Aires