Partes con y sin digitación.
Todos los violonchelistas conocen la sonata de Debussy, que compuso recién en 1915, tres años antes de su muerte. Sin embargo, Debussy ya había escrito dos obras para violonchelo y piano en 1882, cuando sólo tenía 20 años. En gran medida permanecieron ocultos a la vista del público porque el autógrafo del “Intermezzo” –la única fuente de esta obra– estuvo inaccesible durante décadas. Hoy, Henle Publishers tiene la suerte de poder presentar una edición Urtext del “Intermezzo”, que también incluye el “Scherzo” que se publicó póstumamente en 1995. Las digitaciones y los arcos corrieron a cargo de Jeffrey Solow (violonchelo) y Eckart. Sellheim (piano).